26 mayo, 2023

Rector de la UARM brinda conferencia sobre ética para trabajadores de la Sunarp

El P. Rafael Fernández Hart SJ, rector de la Universidad Antonio Ruiz de Montoya (UARM), participó como expositor en la II Jornada Preparatoria al XXI Congreso Anual de Derecho Registral –CADER Sunarp denominado “La ética y el registro en el marco de la política nacional de modernización”. En su ponencia abordó el tema: “Criterios éticos para el servicio público”. La modalidad fue virtual y contó con más de mil participantes, principalmente, de la Zona Registral Nº XII- Sede Arequipa de la Sunarp.

El Congreso Anual de Derecho Registral – Cader Sunarp es un espacio académico de reconocida trascendencia en el ámbito jurídico nacional, creado por la Superintendencia Nacional de los Registros Públicos cuyo objetivo es propiciar la investigación, reflexión, análisis e intercambio de conocimientos y experiencias del Registro y su relación con otras ramas del derecho y la realidad nacional. En ese sentido, la UARM felicita el interés de los organizadores por abordar el tema ético vinculado a los servicios públicos.

El filósofo inició su presentación con una propuesta: revisar los diferentes niveles de conflicto (religioso, moral y político) de un enfrentamiento histórico entre Jesús de Nazaret y los fariseos, el cual terminó con el asesinato del Nazareno. La reflexión llevó a afirmar que no se podría decir que Jesucristo rechazó la ley, sino que intentó que se comprenda su sentido. Propuso un criterio que no consiste en repetir consignas de manera mecánica. Ello no supone eliminar las leyes, dado que estas tienen como razón de ser: crear las condiciones de una convivencia sana y habitada por el bien. Sin embargo, el bien no es sencillo y necesita estar acompañado de discernimiento.

El P. Rafael Fernández Hart SJ explicó que el puro ejercicio de la autoridad puede ser un acto inmoral. Fue enérgico en ese punto, dado que la licitud no es sinónimo de moralidad. Por lo tanto, hay que considerar que el discernimiento debe ser muy fino ya que, en efecto, que pueda hacerlo, es decir que tenga esa potestad, no asegura la calidad de acto ético porque no estoy actuando en función del bien universal, sino de mi propio querer, amor e interés.

Uno de los peligros del funcionario es mantenerse en una lógica del automatismo, peor, aunque ese automatismo parezca funcionar, se convierte en un lugar de confort en el que no solo se experimenta cómodo, sino seguro. El gran peligro de los automatismos es que suspenden el juicio o el discernimiento y debemos preguntar con claridad si se puede hacer el bien, como quien dice, por descuido o por distracción. Eso es lo que permite, por ejemplo, el enquistamiento de mafias en medio de nuestro trabajo y nos acostumbramos y hacemos como si no existiesen o como si fuesen un mal necesario.

Fernández hizo hincapié en que resulta que el bien no solo requiere un discernimiento permanente para encontrarlo, sino que es indispensable una voluntad decidida para realizarlo. El bien es laborioso, exigente y pedirá que tarde o temprano sacrifiquemos algo de nosotros, o de nuestro gusto, o de nuestra sensualidad. Tiene que quedar claro que no es posible el bien, sino no estamos dispuestos a cierto tipo de renuncia, y por supuesto, nadie está pretendiendo que entremos en una vía ascética.