El historiador Daniel Parodi, docente del Departamento de Humanidades de la Universidad Antonio Ruiz de Montoya, compartió con La República un análisis respecto a las resistencias que genera Pedro Castillo:
En comparación con la candidata de Fuerza Popular, la primera resistencia que genera Pedro Castillo en el electorado viene de sus oponentes, del “terruqueo” sistemático al que ha sido sometido por la mayoría de los medios. Difunden la idea de que un gobierno suyo haría del Perú una Venezuela chavista, una implacable dictadura con un desastre económico.
La segunda proviene del propio candidato y de su grupo político, y es la incertidumbre. Esta es más real. Poco se conocía de ambos antes de la segunda vuelta. Es evidente que Pedro Castillo no se había planteado ser presidente de la República y que carecía de un equipo técnico que lo acompañase en el empeño. Tras marchas y contramarchas recién en las últimas semanas ha podido presentarle al país propuestas más o menos coherentes, pero en muchos electores hay la idea de que el candidato del lápiz no sabrá qué hacer de resultar electo.
La tercera resistencia que genera Castillo es histórica y sociocultural. Nuestro país no ha alcanzado a ser nación y los ciudadanos no logramos vernos como iguales. Persiste aún en los imaginarios colectivos la división entre una parte del país que se percibe más occidental frente a otra más andina y amazónica, limeña versus provinciana. A muchos peruanos aún les resulta poco aceptable que un peruano proveniente del Perú rural pudiese ceñirse la banda presidencial.
Enfoque difundido en el diario La República el 3/06/2021