Foto: El Comercio
Ricardo Falla Carrillo, director del Programa de Humanidades de la Universidad Antonio Ruiz de Montoya, participó en un informe de El Dominical de El Comercio sobre por qué las personas se resisten a acatar las disposiciones durante el estado de emergencia por el COVID-19. El filósofo explicó que en una sociedad que ha interiorizado la libertad de movimiento y de movilidad como un valor fundamental, todo tipo de confinamiento puede ser visto como una restricción.
En el caso de quienes no acatan la cuarentena (no porque tengan el dilema ético de tener que salir a generar ingresos para su familia sino en referencia a las personas que lo hacen sin motivos esenciales), Falla explica que podemos hablar de una falta de conciencia, de no asumirse como sujeto moral. La moral tiene que ver con entender que mis acciones tienen repercusión en los demás. La consciencia moral tiene que ver con descubrirse como sujeto moral y como sujeto de derechos y de deberes. Es decir, como ciudadanos. “En nuestro caso hay muchos que viven ensimismados, incapaces de darse cuenta de las necesidades del otro”, expresó.
Informe completo publicado en El Dominical el 30/03/2020