Nuestros bosques están amenazados y el cambio climático impacta seriamente en el medioambiente. Son las poblaciones indígenas las más conscientes de que la situación se agrava cada año. Sus cosmovisiones se vinculan directamente con la naturaleza y es por ello que escucharlas nos permite una mirada más amplia y sostenible para enfrentar el problema. La VI Jornada de Comunicación y Democracia, realizada en la Ruiz, fue un espacio de diálogo intercultural que demostró el valor de sus aportes y reflexiones.
El secretario general de Religiones por la Paz América Latina y el Caribe, Elías Szczytnicki, indicó que el diálogo hace posible la transformación de conflictos y la promoción de sociedades justas. Según la experiencia de su organización, para este tipo de diálogo se deben identificar primero los aspectos en común entre las diferentes comunidades de fe y a partir de ello trabajar en conjunto. La atención no está en la teología, sino en lo público.
Eva Boyle, directora del Instituto de Fe y Cultura de la Ruiz de Montoya, destacó que espacios de diálogo como el Sínodo Panamazónico, evento que reunirá distintos pueblos originarios, son muy importantes para reflexionar y tomar decisiones sobre cómo frenar el cambio climático. “Los bosques son muy importantes, pero cada día están más amenazados y cada día degradan más la tala ilegal, las industrias extractivas y los derrames de petróleo en los ríos”, expresó.
El sociólogo y mayor indígena del pueblo ashaninka-nomatsiguenga, Guillermo Ñaco Rosas, explicó que dentro de la cosmovisión amazónica cada ser vivo se interconecta y nadie es ni vive independiente de la sociedad. “Hay pueblos cuya identidad se forja en una relación holística entre su propia lengua y el territorio. Miramos de manera horizontal, reconocemos y aceptamos las visiones de los otros para vivir en armonía”.