Los retos globales van más allá de las competencias y habilidades que debe tener cualquier directivo. Por ello, la demanda de posgrados se amplía y se orienta a programas vinculados a las humanidades y las ciencias sociales. Esto guarda relación con que la importancia de estudiar un posgrado supera de lejos el ascender en una posición laboral o tener mayores posibilidades de acceder a mejores remuneraciones. Mario Granda Rangel, secretario académico de la Escuela de Posgrado de la Universidad Antonio Ruiz de Montoya, participó en un informe de Perú21.
“Existe una tendencia mundial de la que las empresas y las instituciones públicas no pueden excluirse: la sostenibilidad, la conciencia ciudadana global, la mediación en conflictos, el trabajo más científico (es decir, apoyado en la investigación) sobre el desarrollo humano y social. Por ello, las maestrías vinculadas con competencias de índole humanista son y serán cada vez más apreciadas y requeridas. El país rumbo al bicentenario enfrenta grandes retos para ser una sociedad con mayores oportunidades y menor desigualdad”, expresó.
Informe publicado en Perú21 28/02/2018