Los estudiantes de la Escuela Profesional de Ciencia Política de la Universidad Antonio Ruiz de Montoya participaron del I Encuentro Científico de Investigación de Estudiantes organizado por la Universidad Femenina del Sagrado Corazón (Unifé). El evento tuvo como objetivo incentivar la investigación en los jóvenes universitarios en distintas aéreas: ciencias sociales, economía y ciencias naturales. Participaron también estudiantes de la Universidad de Lima, la Universidad del Pacífico, entre otros.
La politóloga Adriana Urrutia, docente de la Escuela, junto a sus alumnos del curso de Metodología para la Investigación en Ciencia Política, compartieron el proyecto de investigación “Existir al margen de lo público: Imaginarios y decisiones de los jóvenes de Pueblo Libre”. Esta investigación fue elaborada por los estudiantes Percy Agurto, Ivette Angulo, Manuel Cáceres, Nicole Guevara, Ernesto Luque, Alejandro Mosquera, María Fernanda Pacheco, Andrés Ponce, Mauricio Reyes, Tadeo Ríos, Rodrigo Torales, Tryxie Tonato, Omayra Peña y Aaron Wong.
Este trabajo de investigación integra cuatro estudios que analizaron el rol de los jóvenes en las políticas públicas desde diferentes aspectos: violencia, ocio, empleo y participación, tomando como campo de estudio la gestión de la Municipalidad de Pueblo Libre. Aaron Wong fue el encargado de exponer los resultados. “Buscamos explorar las decisiones de los jóvenes y cómo se relacionan con el espacio público y el ámbito político”, explicó.
La investigación concluye que los problemas de la juventud respecto a su falta de participación política y la violencia en ciertos grupos sociales se pueden explicar con su exclusión de las políticas públicas por considerarlos poco experimentados y, en segundo lugar, por la falta de oportunidades para acceder a empleos de calidad. La participación juvenil es invisibilizada porque no existe un interés político en conocer realmente los logros y metas de esta, sino de solo aprovecharla con fines electorales. Las políticas públicas hacia la juventud pueden contribuir a su inclusión; sin embargo, estas pertenecen al “mundo de los adultos”. Por lo tanto, muchas de esas políticas públicas no son efectivas.